PAISAJE EXPANDIDO
Pensar en la actualidad latinoamericana sin la asfixiante presencia del caos urbano es prácticamente imposible. Ciudades desordenadas con poca -o nula- planificación que tienden a un crecimiento tan convulso como sus interacciones y relaciones socioeconómicas, realidades paralelas en donde coexiste lo impoluto del concreto y el vidrio con lo rústico y violento del metal de una fría lámina oxidada multipropósito que puede ser un techo o, en su defecto, una pared. El transeúnte común se limita a sobrevivir dentro de un territorio hostil abarrotado por un cúmulo de elementos que le agreden visualmente como reflejo de una sociedad que se alimenta de la sobreproducción; son todos estos atenuantes los que crean un claro desequilibrio en la forma en que se percibe el mundo, difuminando los límites entre lo natural y lo artificial.
Es en esta caótica interrelación de factores en donde el artista guatemalteco Jorge Luis Linares encuentra el leitmotiv de su práctica artística, expresándolos en un lenguaje adecuado a la práctica artística contemporánea. La producción de estas escenas desbordadas indaga en la alteración del entorno por medio de la introducción de entes impropios en la escena en Puentes al cubo (2016), sobresaturación de imágenes como en Contaminación visual 01 (2013) o simplemente resignificando objetos como en la pieza de video Tráfico aéreo (2013) y, es así, como da vida a mundos alternativos en donde el ser humano se ve acechado y consumido por las mismas cosas que ha creado. Haciendo uso de su formación académica, Linares forma un hilo conductor que replantea la esencia conceptual y material del paisaje urbano, partiendo de un registro fotográfico o de video, rediseña el espacio circundante, deconstruyéndolo como un algoritmo en donde cada componente incorporado digitalmente aporta conceptual y formalmente al producto final que es cada una de las piezas exhibidas, invitando al espectador a reflexionar sobre el trasfondo de conceptos como territorio, habitabilidad, pertenencia y (sub)desarrollo creando a veces lugares heterogéneos que parecen ser imposibles de habitar.
Ciertamente, un escenario como el que este conjunto de obras presenta al espectador obligará a repensar cuál es el verdadero contexto de esta relación parasitaria que se mantiene con la naturaleza y el abusivo uso que se hace de ella pero también, buscará generar una intricada respuesta visual a los conflictos de percepción social en los que se desenvuelve el día a día del país.
Andrés Cordón, enero 2024.
Es en esta caótica interrelación de factores en donde el artista guatemalteco Jorge Luis Linares encuentra el leitmotiv de su práctica artística, expresándolos en un lenguaje adecuado a la práctica artística contemporánea. La producción de estas escenas desbordadas indaga en la alteración del entorno por medio de la introducción de entes impropios en la escena en Puentes al cubo (2016), sobresaturación de imágenes como en Contaminación visual 01 (2013) o simplemente resignificando objetos como en la pieza de video Tráfico aéreo (2013) y, es así, como da vida a mundos alternativos en donde el ser humano se ve acechado y consumido por las mismas cosas que ha creado. Haciendo uso de su formación académica, Linares forma un hilo conductor que replantea la esencia conceptual y material del paisaje urbano, partiendo de un registro fotográfico o de video, rediseña el espacio circundante, deconstruyéndolo como un algoritmo en donde cada componente incorporado digitalmente aporta conceptual y formalmente al producto final que es cada una de las piezas exhibidas, invitando al espectador a reflexionar sobre el trasfondo de conceptos como territorio, habitabilidad, pertenencia y (sub)desarrollo creando a veces lugares heterogéneos que parecen ser imposibles de habitar.
Ciertamente, un escenario como el que este conjunto de obras presenta al espectador obligará a repensar cuál es el verdadero contexto de esta relación parasitaria que se mantiene con la naturaleza y el abusivo uso que se hace de ella pero también, buscará generar una intricada respuesta visual a los conflictos de percepción social en los que se desenvuelve el día a día del país.
Andrés Cordón, enero 2024.